Ataques personales, falsas denuncias sobre altercados internos en la oposición y políticos que pretenden magnificar su influencia real en redes sociales, son algunas de las irregularidades detectadas esta semana en Venezuela
El escenario político de Venezuela estuvo contaminado por varias narrativas orientadas a cuestionar la credibilidad y la capacidad de liderazgo de figuras clave de la oposición. A través de métodos de desinformación, ataques directos contra líderes opositores y manipulación de plataformas de redes sociales se busca, desde diferentes perspectivas, influir en la percepción pública y el discurso político.
María Corina Machado: su salud mental y ataques de género
“Con el Mazo Dando”, el programa televisivo transmitido por Venezolana de Televisión y conducido por Diosdado Cabello, es conocido por propagar rumores mediante el uso de cartas atribuidas a supuestos “informantes” anónimos. En la edición del pasado 13 de marzo, en dos cartas firmadas por estos supuestos informantes, “Patricio El Maracucho” y “La Patriota Valle Arriba”, se hizo referencia a supuestos diagnósticos sobre la salud mental y uso de pastillas para dormir por parte de María Corina Machado.
La anonimización del origen de la desinformación es una técnica regularmente usada por propagandistas venezolanos para legitimar acusaciones que no están basadas en evidencias. Actores detrás de estas campañas evitan responsabilidades, alegando simplemente exponer denuncias que necesitan investigación. Este enfoque pretende esquivar la culpabilidad manteniendo la difusión de falsedades bajo una apariencia de responsabilidad.
Estas afirmaciones sin pruebas desde el programa de televisión dieron origen a una ola de memes amplificados por propagandistas y desinformantes que militan en las filas del oficialismo como Mario Silva, conductor del programa “La Hojilla” (ver 1 y 2). También se vio al comunicador popular Ernesto Meléndez, difundir un video de Machado al que le colocó un filtro de cara de payaso con el que la acusa de “amenazar” a Nicolás Maduro.
Ernesto Meléndez se ha destacado en redes sociales por su apoyo al gobierno, participando en campañas de difamación contra opositores. Su historial de desinformación incluye ataques contra el periodista y activista por los derechos digitales Melanio Escobar y el supuesto vínculo del exteniente Ronald Ojeda, asesinado en Chile, con el tráfico de armas.
Entre otros memes con menor difusión, Cazadores de Fake News identificó un montaje difuminado de un cuerpo desnudo con el rostro de María Corina Machado, lo que representa una forma severa de violencia política. La difusión de imágenes humillantes y la manipulación de su imagen buscan minar la dignidad y estereotipar la participación de líderes políticos de oposición, como Machado.
Desunión en la oposición
Pedro Carvajalino, comunicador afiliado al oficialismo y presidente de Venezuela News, un portal conocido por su tendencia a la propaganda y la desinformación, difundió imágenes “recordando” supuestos conflictos internos dentro de la oposición venezolana. Las imágenes, acompañadas de comentarios irónicos sobre la “unidad” entre las filas opositoras, mostraban un video de un enfrentamiento físico con sillas durante un evento de Juan Guaidó en el estado Zulia que data del año 2022.
Las investigaciones de Cazadores de Fake News revelaron que éste y otros altercados contra líderes opositores, fueron instigados por miembros del PSUV. En varias ocasiones, militantes de dicho partido se infiltraron en eventos de la oposición con el objetivo de provocar desórdenes y entorpecer la realización de dichas reuniones, difundiendo posteriormente registros descontextualizados de lo realmente ocurrido.
El uso de estas imágenes y videos por parte de propagandistas buscaba fortalecer la percepción de un rechazo popular hacia líderes opositores como Juan Guaidó, quien enfrentó situaciones similares en distintas localidades, incluyendo Puerto Cabello, San Carlos y durante 3 eventos en el oriente del país, así como en un conversatorio en Washington DC; también María Corina Machado fue blanco de un ataque parecido en La Guaira en el que se pudo identificar a un concejal del PSUV como el líder del incidente, confirmando la intencionalidad política detrás de estos actos de violencia.
Esta estrategia gubernamental de contrapropaganda busca minimizar la influencia de la oposición. A través de un abanico de tácticas como la censura y la desinformación, el oficialismo intenta mantener su hegemonía comunicacional. La disparidad de recursos entre oficialismo y oposición demuestra una asimetría que favorece al gobierno, permitiéndole imponer sus narrativas y silenciar voces disidentes.
Supuesto masivo apoyo popular a un líder opositor
Recientemente, el candidato presidencial opositor Leocenis García, utilizó una carta bajo la manga que viola directrices claras en cuanto a la manipulación de plataforma en X.
La cuenta @leocenisoficial que actualmente usa el líder de ProCiudadanos y tiene 947.399 seguidores, fue objeto de quejas de usuarios que denunciaron no ser seguidores de García y no entender por qué —súbitamente— sus publicaciones comenzaron a aparecer en sus feeds.
Una investigación detallada de Cazadores de Fake News, apoyada en un registro de Wayback Machine del 11 de abril de 2022, reveló que la cuenta de X que actualmente usa García fue creada el 7 de marzo de 2010 con el Twitter ID 120873942 y pertenecía anteriormente al portal @reportero24. Esto sugiere que el candidato opositor obtuvo (por compra o cesión) una cuenta con una amplia base de seguidores que no adquirió de manera orgánica.
La cuenta anterior utilizada por García — que actualmente opera bajo @LeocenisPrensa— está identificada con el Twitter ID 334950418, fue creada el 13 de julio de 2011 y posee 174.425 seguidores.
La transición de García a una cuenta con un número significativamente mayor de seguidores y previamente asociada a otro usuario, plantea serias dudas sobre la autenticidad del apoyo que este líder opositor dice tener. Tal práctica contraviene directamente las políticas de Twitter contra la manipulación de la plataforma, las cuales prohíben expresamente la inflación artificial de seguidores y la transferencia o venta de cuentas, en un intento por preservar la integridad y autenticidad del diálogo en la red.
La manipulación de plataformas digitales y la desinformación se usan estratégicamente para distorsionar la opinión pública. Estas acciones resaltan la importancia de la transparencia y la autenticidad en el discurso político y la necesidad urgente de que tanto individuos como plataformas digitales refuercen sus compromisos éticos para preservar la integridad del espacio democrático.
Cazadores de Fake News investiga a detalle cada caso, mediante la búsqueda y el hallazgo de evidencias forenses digitales en fuentes abiertas. En algunos casos, se usan datos no disponibles en fuentes abiertas con el objetivo de reorientar las investigaciones o recolectar más evidencias.