Acusaciones de terrorismo contradictorias y persecución a prensa y ONG afloran en plena precampaña electoral

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La desinformación detectada durante esta semana va desde la fabricación de vínculos de un partido opositor con el terrorismo, el uso de videos manipulados para exagerar la falta de apoyo a los líderes de oposición y otra campaña de descrédito hacia periodistas y ONG

Esta semana, la agenda informativa estuvo dominada por la controversia en torno a la detención de Jerry Ostos –supuestamente vinculado con Vente Venezuela– bajo cargos de “terrorismo”, lo que crea dudas sobre las evidencias y el posible uso político de estas acusaciones. 

Al mismo tiempo, los continuados ataques en línea contra periodistas y organizaciones no gubernamentales, revelan un esfuerzo coordinado para utilizar la desinformación y el hostigamiento en redes sociales para controlar el espacio informativo.

La manipulación de la percepción pública contra figuras opositoras como María Corina Machado, también demuestra el uso de narrativas fabricadas para socavar la credibilidad y el apoyo popular hacia la oposición.

¿La captura de Jerry Ostos es prueba de que Vente Venezuela es una “microsecta” terrorista?

Jerry Ostos, presentado como un militante de Vente Venezuela, fue detenido en un acto político bajo cargos de terrorismo y tentativa de magnicidio. Sin embargo, su mutación ideológica en redes sociales quedó registrada y con evidencias forenses digitales se pudo documentar cómo pasó de ser un ferviente seguidor de la revolución bolivariana, a la supuesta militancia activa en el principal partido opositor al gobierno de Maduro.

El vínculo de Ostos con el partido de María Corina Machado se fundamenta en una fotografía y los últimos 3 años de sus publicaciones en sus cuentas de redes sociales. Lo anterior generó cuestionamientos sobre la solidez de las pruebas presentadas y sugiere una posible motivación política detrás de las acusaciones, que se suman a otras detenciones de dirigentes de Vente Venezuela. 

La detención de líderes y miembros de esta partido ha sido documentada en reportajes de medios como Infobae, y crea dudas en cuanto al uso del sistema judicial y las acusaciones de terrorismo como herramientas contra la disidencia política.

Desprestigio y ataques contra Sebastiana Barráez y Cazadores de Fake News

Un grupo de aproximadamente 50 cuentas falsas, creadas en meses recientes, se coordinaron para retuitear y promover ataques utilizando etiquetas como #SebastianaMiente, en un intento por deslegitimar los trabajos de investigación acerca de los vínculos de Jerry Ostos con el chavismo-madurismo hechos por la periodista Sebastiana Barráez y la ONG anti desinformación Cazadores de Fake News. Esta red de cuentas trolls está relacionada con el comunicador oficialista Ernesto Meléndez, que en el pasado intentó manipular la red social X para propagar contenido que incita al odio y la polarización, bajo la fachada de defender el orden y acusar a periodistas y activistas, como Melanio Escobar, de violar la «Ley del Odio» en Venezuela.

La utilización de redes de cuentas troll coordinadas y tácticas de desinformación revela un mecanismo que busca implantar una narrativa única y conveniente para el oficialismo, mientras se censuran y se intenta invalidar las versiones alternativas o complementarias que emergen desde la sociedad civil y el periodismo independiente. 

“Ni siquiera los opositores apoyan a María Corina Machado”

Un video de Carla Angola fuera de contexto, que la presentaba como detractora de María Corina Machado Machado, se suma a los intentos por fabricar “pruebas” de que la líder opositora no tiene respaldo ni del pueblo ni de otras figuras de la oposición. 

Esta narrativa ya había alcanzado a María Corina Machado durante la campaña previa a las primarias opositoras durante su recorrido por el estado de La Guaira, cuando se le acusó falsamente de enfrentar un rechazo masivo del «pueblo». La investigación desmintió esta narrativa, demostrando que los incidentes fueron provocados por militantes identificados del PSUV. 

Desde el año 2019, esta misma narrativa ha buscado desacreditar a figuras opositoras mediante ataques y campañas de desinformación coordinadas desde sectores oficialistas como un intento por debilitar la imagen pública de la oposición venezolana.


Cazadores de Fake News investiga a detalle cada caso, mediante la búsqueda y el hallazgo de evidencias forenses digitales en fuentes abiertas. En algunos casos, se usan datos no disponibles en fuentes abiertas con el objetivo de reorientar las investigaciones o recolectar más evidencias.

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