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La participación del alto mando de las FANB en la difusión de un bulo contra la oposición —previamente desmentido— redimensiona el problema de la desinformación electoral
Esta semana, las narrativas desinformativas fueron orquestadas para desacreditar a importantes líderes opositores como María Corina Machado y el candidato de la Plataforma de la Unidad Democrática, Edmundo González. Los altos mandos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) encabezaron la difusión de algunos de estos contenidos.
Con un video manipulado, desinformantes intentaron “probar” los planes de desmantelamiento de cuerpos militares y policiales, y la privatización de la educación y servicios básicos de María Corina Machado y, en general, del plan de gobierno opositor. En el registro se veía a Machado con un pizarrón lleno de mensajes que explicaban estas medidas mientras daba un discurso que no tocaba esos temas.
Luego de ser desmentido por verificadores locales, Domingo Hernández Larez, Comandante Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y otras cuentas similares amplificaron el bulo.
Paralelamente, los rumores infundados sobre la salud y el pasado de González, incluyendo su supuesta vinculación con la CIA y su implicación en masacres históricas, siguen siendo atizados de vez en cuando para influir en la opinión pública.
Más videos manipulados para desinformar
La publicación de un video manipulado, en que se veía a María Corina Machado dando una charla en un aula con un pizarrón al fondo, rayado con mensajes sobre la privatización de PDVSA, la electricidad, educación y eliminación de las FANB, el CICPC y la DGCIM, se usó para sugerir que Machado planeaba disolver éstos cuerpos de inteligencia militar y policial.
En el video original, el pizarrón estaba limpio y corresponde a la grabación de un encuentro que sostuvo Machado, junto al candidato presidencial Edmundo González, con los jóvenes del Instituto de Estudios Políticos y Sociales “Red Forma” el pasado 15 de junio. En ese encuentro, María Corina Machado no habló sobre disolver las FANB y demás cuerpos militares y policiales, ni de la privatización de empresas del Estado.
Comandante del CEOFANB difunde video manipulado de Machado
Domingo Hernández Lárez, Comandante Estratégico de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) compartió el video manipulado en el que María Corina Machado habla frente a un pizarrón en el que aparece escrito un esquema con las palabras “Eliminar: FANB, DGCIM, CICPC”. Esto con la intención de sugerir que Machado pretende disolver estos cuerpos de inteligencia militar y policial.
Hernández Lárez acompañó el video de Machado con un discurso de Hugo Chávez sobre quienes aprovechan “coyunturas difíciles” para restaurar capitalismo, neoliberalismo y demás doctrinas políticas con el propósito de “acabar con la Patria”.
Machado se pronunció al respecto:
Aunque Machado acusó a las FANB de ser autores de la desinformación difundida, no hay prueba de ello. Sin embargo, sí se pudo comprobar su rol en la amplificación del contenido falso aún después de que se habían publicado desmentidos al respecto.
El bulo fue compartido en X por al menos cuatro cuentas militares de alto rango: la cuenta oficial de Domingo Hernández Lárez, Comandante Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), la del Ejército Bolivariano, la de la Milicia Bolivariana, y la de la televisora de la FANB, TVFANB.
El tweet de Hernández Lárez superó los 16.000 retweets y las 468.000 reproducciones principalmente de cuentas operadas por funcionarios militares.
Gran parte de esta amplificación coordinada proviene del llamado “Batallón 3.0”, una operación de información militar venezolana que, hasta el momento, ha pasado inadvertida por los encargados en X de controlar las estrategias gubernamentales de manipulación de plataforma.
Ni agente de la CIA ni detractor de chavistas
Desde que se confirmó a Edmundo González como candidato unitario para las presidenciales del 28 de julio, propagandistas alineados con el gobierno han intentado posicionar narrativas cuyo propósito es descalificar a González Urrutia como candidato presidencial y mellar la confianza del electorado.
Inicialmente, la propaganda intentó presentar a González como un hombre excesivamente anciano y gravemente enfermo, incapaz de enfrentar las demandas de una campaña presidencial. Paralelamente, también se propagó el rumor de que González desprecia a los chavistas y les deseó morir de cáncer, de la misma manera en que falleció Chávez.
Otra campaña de desinformación intentó vincular al candidato de la PUD con Estados Unidos y las masacres en El Salvador durante los años 80. Para ello, se distribuyó la imagen de una credencial de la CIA con la foto de González, sugiriendo que fue reclutado por esta agencia y posteriormente enviado como adjunto a la embajada de Venezuela en El Salvador, donde supuestamente participó en la denominada “Operación Centauro” que, a su vez, es un antiguo bulo impulsado por la Unión Soviética y desmentido desde principios de los años 80.
También se difundió el rumor de que González sufrió un infarto y que por eso ingresó al Hospital Metropolitano de Caracas. Uno de los principales portavoces de la narrativa de que González no goza de buena salud es Diosdado Cabello, a través de su programa “Con el Mazo Dando”, un talk show transmitido en la televisora estatal Venezolana de Televisión.
En mayo, Cazadores de Fake News identificó que más de 40 cuentas falsas suplantan la identidad de Edmundo González en Instagram.
La desinformación que gira en torno al candidato de la PUD tiene como propósito erosionar su credibilidad ante el electorado. Estos rumores buscan sembrar dudas y desconfianza entre los votantes, desviar la atención de sus propuestas de campaña y consumir sus recursos en la defensa contra estas acusaciones.
Además, estas estrategias de desinformación refuerzan la narrativa del gobierno y aumentan la polarización política, dificultando así la formación de un frente opositor sólido y eficaz.
Cazadores de Fake News investiga a detalle cada caso, mediante la búsqueda y el hallazgo de evidencias forenses digitales en fuentes abiertas. En algunos casos, se usan datos no disponibles en fuentes abiertas con el objetivo de reorientar las investigaciones o recolectar más evidencias.